¿Es Ese el Espíritu Santo? Cómo Saber Cuando Él Está Hablando
Todos nosotros estamos familiarizados con las voces de las personas más cercanas a nosotros. Piensa en un familiar o amigo cercano. ¿Cómo suena su voz? ¿Cuál es el tono y la tonalidad? ¿Es áspera o suave? ¿Rápida o lenta? ¿Tiene algún acento? ¿Podrías reconocer su voz por teléfono? Incluso ahora, mientras lees esto, probablemente puedas escuchar su voz en tu cabeza.
Las voces tienen autoridad. Las palabras de consejo que vienen de la voz de un amigo o padre tendrán un peso diferente para nosotros que las mismas palabras viniendo de un extraño. Así que, cuando se trata de escuchar la voz del Espíritu Santo, es vital identificar quién está realmente hablando. ¿Es el Espíritu? ¿Nuestros propios deseos? ¿O algo completamente diferente?
Cada persona tiene cualidades vocales únicas. De la misma manera, la voz del Espíritu Santo tiene cualidades únicas que te ayudarán a saber que es Él. ¿Entonces, cómo suena Él?
Idioma “La Biblia”
2 Timoteo 3:16 El Espíritu Santo nunca contradirá la Biblia. Cuanto mejor conozcas la Biblia, mejor podrás reconocer Su voz.
Tono “Voz apacible y delicada”
1 Reyes 19:11-12 La Biblia describe Su voz como un susurro. No es un susurro literal sino una voz difícil de escuchar cuando estás ocupado.
Tono “Pacífica”
Salmo 23 Su voz te ayudará a encontrar paz incluso cuando haya caos a tu alrededor. Un refugio en la tormenta.
Resonancia “Afirmación”
Su voz resonará con otros cristianos. Es útil afirmar Su voz con amigos cristianos.
Ritmo “Sincronización”
Su voz a menudo te hablará en tus circunstancias. Estate atento a coincidencias milagrosas.
Date tiempo para practicar aprender la voz del Espíritu Santo. Un día, Su voz será tan familiar que será como una segunda naturaleza reconocerla.
La Biblia dice que perseguir al Espíritu Santo es algo que debemos buscar activamente Efesios 5:18-19. Intencionadamente ponte en una posición donde puedas escuchar Su voz. Acércate a Dios en oración con un corazón expectante de que Él te hablará y guiará.
Aquí tienes algunas formas clave de posicionarte para escuchar al Espíritu Santo:
Aprender a escuchar al Espíritu Santo requiere tiempo y compromiso. No te rindas solo porque no escuches nada de inmediato. Sé intencionado. Encuentra un lugar tranquilo hoy y dedica 15 minutos a buscar activamente la voz del Espíritu Santo.
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